Hablar de los guías espirituales es también hablar de nosotros mismos, porque a través de ellos, nosotros nos expresamos. Inclusive los descubrimientos provienen de la inspiración a través de ellos. La comunicación con los guías espirituales no necesariamente tiene que ser con palabras o voces de superación personal, sino va mucho más que eso.
El primer guía que existe es la Intuición, el cual es el tuyo propio. Cada quien le da la intensidad. Todos tenemos la intuición pero cada quien le presta diferente atención.
Es como cuando vamos al gimnasio, conforme lo vamos practicando, se va expandiendo. Conforme vamos practicando, vamos diferenciando nuestra propia voz con la de nuestros guías o con nuestro Ser Superior.
¿Cómo contactar un guía espiritual?
Nuestros guías espirituales los escuchamos en nuestro Silencio Mental. Cuando hay ruido mental, no es posible estar en contacto con ellos, porque lo que escuchamos son los pensamientos mentales. Cada ser humano tenemos una forma diferente de contactarlo, cada quien tiene su propio protocolo de comunicación. A través de una conversación natural, a través de una canalización, o en el día a día.
No todos podemos tener el contacto con los guías de la misma manera. Cada quien debe buscar una forma propia de contacto. Debemos tener cuidado en querer contactar como otros lo hacen, porque no todos tenemos las mismas habilidades, porque lo único que provocaríamos es que no logremos la comunicación. También considerar que el contacto debe ser personal, nunca debe ser para querer demostrar a los demás una mayor capacidad.
Hay personas que tienen habilidad para contactar de manera natural con un guía, son personas que canalizan mensajes de seres de otras dimensiones. Inclusive conocen con quien contactan y pueden dialogar con ellos con naturalidad como si dialogáramos entre nosotros. Pero eso es algo propio de personas con esa habilidad. No todos podemos contactar de la misma manera.
Cuando no sabemos el guía espiritual que estamos contactando, no es necesario indagarlo. Lo importante es que lo que estoy recibiendo “me ayuda a mi, y también puede ayudarle a los demás”.
Las señales también pueden ser mensajes de los guías. Algunos podemos sentir las señales con una gran intensidad, y solamente puede ser para nosotros la señal, no tiene el mismo mensaje ni la misma señal para todos. Es un mensaje que llega como una flecha a alguien en particular, porque le resuena y encaja perfectamente en el momento y la situación que está viviendo, porque es un refuerzo o información adicional.
¿Quién puede tener contacto con los guías espirituales?
El contacto con los guías es algo natural. Todos podemos lograrlo. No es algo que debemos desarrollar, pero si algo que debemos fomentar y expandir. Es como cuando hacemos ejercicio: los músculos se expanden, se hidratan, se hacen flexibes; en cambio, se deterioran si de deja de hacer ejercicio. Lo mismo sucede con el contacto con los guías, debemos fomentarlo.
Los guías espirituales no hablan con voces como nosotros lo hacemos, ellos hablan con la voz del Silencio. La comunicación con los guías pueden venir también desde nuestro sentimiento. Si estamos callados, podemos escuchar desde nuestro Silencio el sentimiento, y traducir ese sentimiento en palabras que puedan ser interpretadas por nosotros mismos y para los demás.
Los guías espirituales hablan desde nuestro Ser Interior.
Es importante considerar que el contacto con ellos, se hace también cambiando el estado vibracional. Es como estar en un estado sutil de confianza, en este estado la mente se relaja automáticamente; ya que así la mente no puede acceder a los pensamientos.
Fuente: CIUDAD VIRTUAL DE LA GRAN HERMANDAD BLANCA.
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