El apego es algo así como tomar algo con mucha fuerza, pero el amor genuino es tomar con suavidad, permitiendo que las cosas fluyan con facilidad, sin presionar.

Mientras más nos aferramos a otros, más sufriremos, se piensa que quién más se aferra más ama.

Todo tipo de relación en la que imaginemos que podemos sentirnos completos a través del otro, está destinada a hacernos infelices.

Idealmente las personas deberían estar juntas  cuando se sientan satisfechos consigo mismos.

y por lo tanto apreciando eso en la otra persona, en lugar de esperar que el otro les de ese sentimiento de bienestar que no sienten por sí solos. Eso causa muchos problemas, además de la proyección que implica el romance, donde proyectamos todos nuestros ideales, deseos y fantasías románticas de la otra persona que no puede satisfacer, una vez que los conoces a fondo te das cuenta que no es príncipe o la princesa que imaginabas, es una persona común con su propios problemas.

Es hasta desarrollar la  bondad amorosa y la compasión por la persona que  tu relación será más real y profunda.

Fuente filosofía Budista

 

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